Washington, 22 jul (Aprac Bol Radio Digital) — Después de 24 días de intensos debates y presiones, Joe Biden ha decidido poner fin a su intento de reelección, a través de un mensaje en la red social X este domingo, en el que el presidente de Estados Unidos, con 81 años, anunció que no se postulará para un segundo mandato en las elecciones de noviembre.
Empero, expresó su apoyo explícito a Kamala Harris, su vicepresidenta, como candidata demócrata para confrontar con Donald Trump en las urnas.
“A mis compatriotas”, así comenzó su comunicado, destacando que, en los últimos tres años y medio, su administración había logrado avances significativos. Enumeró logros como la fortaleza de la economía estadounidense, la reducción de los precios de los medicamentos, el incremento de las prestaciones sanitarias, la aprobación de la primera ley de control de armas en tres décadas y la histórica elección de la primera afroamericana al Tribunal Supremo.

Sin embargo, estos logros no fueron suficientes para mitigar la presión que se acumulaba sobre él, especialmente después del desastroso debate con Donald Trump.
El mensaje de Biden, que pone fin a casi un mes de incertidumbre, llega en medio de una avalancha de críticas y llamadas a la renuncia. Los demócratas, desde donantes hasta figuras emblemáticas del partido como Nancy Pelosi, Barack Obama y los líderes del Congreso Chuck Schumer y Hakeem Jeffries, habían aumentado sus presiones.
La gota que colmó el vaso fue el editorial del The New York Times, que instó a Biden a renunciar, seguido por una creciente lista de legisladores demócratas que le suplicaban reconsiderar su candidatura. La renuncia del senador Joe Manchin, quien había dejado el partido en mayo, pero aún lo representaba en el Capitolio, se sumó a la presión.
El debate del 27 de junio, donde Biden mostró signos de lapsos y confusión, dejó a muchos de sus seguidores en pánico. Sus detractores encontraron en estos momentos de desorientación una evidencia de que su capacidad para seguir al mando era cuestionable.

El mismo viernes, el presidente había insinuado su intención de regresar a la campaña la próxima semana, pero finalmente, cedió ante la realidad y las presiones. Su decisión histórica abre ahora un abanico de posibilidades inciertas para el futuro político de Estados Unidos.
La principal incógnita es quién lo sucederá. La Convención Nacional Demócrata se celebrará en Chicago del 19 al 22 de agosto, y el partido tiene un plazo hasta la primera semana de agosto para designar oficialmente al candidato.
Aunque algunos, como Pelosi, sugieren unas miniprimarias, la opción más lógica parece ser Kamala Harris. Con 59 años, la vicepresidenta podría ser la elegida para la papeleta de noviembre, aunque su compañero de fórmula aún está por decidirse.
En 2020, Biden la escogió no solo por su simbolismo como la primera mujer y persona de ascendencia asiática y afroamericana en la vicepresidencia, sino también por su juventud. Ahora, Harris podría ser el rostro de la nueva generación demócrata.
Mientras la nación se recupera del impacto de esta noticia, la Administración Biden sigue bajo la lupa, especialmente después de que el fiscal especial Robert Hur revelara en su informe que el presidente mostró dificultad para recordar el nombre de su hijo Beau, fallecido en 2015, lo que lo definió como “un anciano con mala memoria”.

